La odisea del Chelsea: De la gloria a las estepas congeladas

La escuadra del Chelsea tendrá que emprender un periplo que bien podría confundirse con una expedición polar. Su enfrentamiento en la Europa Conference League contra Astana se ve trasladado a unos increíbles 1.240 kilómetros de distancia de su sede original, nada menos que cerca de las fronteras de China.

Previsto inicialmente en el Astana Arena, el cambio de escenario se da por obras de renovación en el estadio con capacidad para 30.000 espectadores. Ahora, los Blues ajustan brújulas hacia el Almaty Ortalyk Stadion, un coliseo desprovisto de techo, donde el viento y la lluvia podrían jugar como duodécimo hombre. En Almaty, las temperaturas oscilan entre 2°C y -7°C en diciembre, así que abrigarse será poco menos que una estrategia de juego.

El toque irónico lo pone Cole Palmer, conocido como 'Cold Palmer', que se perderá la cita congelada por haber sido excluido del equipo de la Conference League. La selección, hecha por Enzo Maresca, parece más una cuestión de equilibrar cargas que de adaptación al clima extremo.

La temporada añade exigencias al Chelsea con encuentros contra equipos como Gent, Heidenheim y Panathinaikos. Lo curioso es que mientras los Blues sortean desafíos futbolísticos y climáticos, en Londres se discute sobre el posible traslado del equipo a un nuevo estadio en Earl's Court y una remodelación pendiente que albergaría unos 60.000 aficionados.

A pesar del coste elevado del proyecto, y una lista de problemas por resolver dentro y fuera del campo, la dirigencia parece seguir el adagio moderno del fútbol donde la tradición pesa poco. El Stamford Bridge, hogar histórico del club y que podría quedar en el pasado, se mantiene gracias a la Chelsea Pitch Owners, entidad de aficionados con voz y voto en el futuro del estadio.

Así, en medio de esta tesitura entre modernización y raíces, entre éxito y tropiezos, el Chelsea se prepara para lo que podría ser más que un partido de fútbol: una verdadera odisea en tierras heladas donde, quizás, más que puntos, lo que esté en juego sea el alma misma del equipo.

vía https://www.thesun.co.uk/sport/30406395/chelsea-conference-league-clash-moved-770-miles-chinese-border/